La primera reunión de trabajo del papa fue el sábado en el aula del sínodo. Allí acudieron los cardenales presentes en Roma, tanto electores como no electores.
En este encuentro el papa expuso parte de sus prioridades. Dijo que estas van en la línea del Concilio Vaticano II y de la exhortación apostólica del papa Francisco “Evangelii Gaudium”. En ese documento el pontífice argentino señaló los temas que consideraba que debían ser afrontados en la Iglesia. León XIV citó algunos de ellos y dijo que eran importantes.
LEÓN XIV
El regreso al primado de Cristo en el anuncio; la conversión misionera de toda la comunidad cristiana; el crecimiento en la colegialidad y en sinodalidad; la atención al sensus fidei, especialmente en sus formas más propias e inclusivas, como la piedad popular; el cuidado amoroso de los débiles y descartados; el diálogo valiente y confiado con el mundo contemporáneo en sus diferentes componentes y realidades.
El papa también desveló a los cardenales por qué escogió su nombre. Dijo que venía de León XIII, el papa que afrontó la deshumanización que supusieron algunas dinámicas de la revolución industrial en su tiempo, finales del siglo XIX y principios del XX.
LEÓN XIV
Afrontó la cuestión social en el contexto de la primera gran revolución industrial y hoy la Iglesia ofrece a todos su patrimonio de doctrina social para responder a otra revolución industrial y al desarrollo de la inteligencia artificial, que comportan nuevos desafíos para la defensa de la dignidad humana, de la justifica y del trabajo.
El papa dijo que también había muchos otros motivos que le llevaron a escoger ese nombre pero no desveló si León se debía al primer discípulo de San Francisco.
En todo caso, lo que pareció quedar bastante claro tras esta reunión, era que León XIV de alguna forma quiso seguir con las reuniones precónclave para seguir fomentando la reflexión en el colegio cardenalicio.
JRB
