El papa se ha reunido esta mañana con los participantes del Peregrinaje Ecuménico Ortodoxo-Católico, procedentes de Estados Unidos.
El encuentro ha tenido lugar en el Palacio Apostólico de Castel Gandolfo. A todos ellos les dirigió estas palabras por la unidad:
LEÓN XIV
Roma, Constantinopla y todas las demás Sedes no están llamadas a competir por la primacía, para no correr el riesgo de encontrarnos como los discípulos que, en el camino, incluso cuando Jesús anunciaba su pasión, discutían sobre quién de ellos era el más grande.
Después, dirigiéndose a los presentes, animó a continuar en la búsqueda de la esperanza y sobre todo, en medio del sufrimiento y guerras.
LEÓN XIV
Esto nos llena de gran esperanza, porque sabemos que ningún clamor de las víctimas inocentes de la violencia, ningún lamento de madres que lloran a sus hijos quedará sin ser escuchado. Nuestra esperanza está en Dios, y precisamente porque constantemente bebemos de la fuente inagotable de su gracia, estamos llamados a ser testigos y portadores de esperanza.
Finalmente, expresó el deseo de poder de reencontrarse con todos ellos “en unos meses”, en el marco de la conmemoración ecuménica del 1700.º aniversario del Concilio de Nicea.
Estas celebraciones podrían tener lugar en Turquía y, de hecho, el Vaticano llevaba meses preparando este viaje. Sin embargo nunca llegó a definirse. Por eso, las palabras de León XIV podrían volver a abrir esta posibilidad.
BAM