Esta es una de las últimas veces en las que a san Juan Pablo II se le vio así.... Fue en el año 2000, junto a más de un millón de jóvenes en el Jubileo en Tor Vergata. Pero esto no es un 'deja vu'. 25 años después: mismo evento, mismo lugar y, también, misma sintonía. La diferencia: hay un nuevo sucesor de Pedro. Los papas pasarán, pero esa melodía permanecerá en el tiempo. Lo sabe bien su autor, que nos recibe así. Fíjense en los detalles porque en su casa hasta una simple lámpara esconde partituras musicales. Pero Marco Frisina es más que esos acordes. 700 cantos para la liturgia, 36 oratorios, bandas sonoras para 32 películas, cuatro obras de teatro y música para conciertos. Esto lo ha convertido en una eminencia no solo en el Vaticano. Su talento ha traspasado fronteras. Aunque todo comenzó en el seminario. Un legado de 48 años dedicado al mundo musical, que combina con su ministerio sacerdotal. MARCO FRISINA Sacerdote y compositor musical Es el beso de un padre a un hijo. Frisina estuvo casi 30 años a su servicio, pero también con sus sucesores. MARCO FRISINA Sacerdote y compositor musical Para el papa Benedicto, que también era un gran amante de la música, escribí un oratorio, varias cosas que hicimos en otras liturgias... El papa Francisco era más distante porque no solía asistir a los conciertos. Pero, de vez en cuando, nos daba las gracias. Y con el papa León también nos dio las gracias dos veces, por lo que para nosotros fue muy emocionante, porque solo llevaba en el cargo dos, tres meses... Es lo que hace este compositor: acerca el misterio de Dios al hombre a través del arte musical. MARCO FRISINA Sacerdote y compositor musical Precisamente porque el canto, la música, expresa lo que las palabras no dicen, las palabras no pueden decirlo todo. La música puede expresarlo todo. Y ahí está. Añade a las palabras la fuerza del corazón. Si Frisina se tuviese que quedar con un tiempo litúrgico, sería con el Adviento. Eso sí, elegir una canción favorita para él sería como dejar huérfanas a las demás, pero si hay que arriesgar... MARCO FRISINA Sacerdote y compositor musical Le tengo mucho cariño a la primera canción que escribí, porque es como el primogénito. Es “Alma mía alaba a Dios”. Me encanta, adoro el Adviento y la Navidad. No sé por qué, quizá sean los recuerdos de mi infancia, la ternura de la Navidad. He escrito varias cosas sobre ella. Es una época que me encanta. En un mundo que cambia, su música permanece. Frisina compone lo invisible: el alma de la fe hecha melodía. Y como un eco eterno, su composiciones siguen diciendo lo que las palabras no alcanzan. AM/CA |

















