El mes de agosto comenzó con la celebración del gran evento del Jubileo, el Jubileo de los jóvenes.
La vigilia con el papa León fue el momento más esperado de este gran encuentro: hacia las 19.30h de la tarde, el pontífice llegaba en helicóptero a la gran explanada entre gritos y aplausos de todos los chicos coreaban al unísono 'ésta es la juventud del papa'.
El broche final fue la celebración de la misa de clausura del Jubileo en el que el papa hizo un llamamiento a 'ampliar horizontes'
LEÓN XIV
Como nos han enseñado los beatos Pier Giorgio Frassati y Carlo Acutis, que pronto serán proclamados santos. Aspirad a cosas grandes, a la santidad, allí donde estén. No se conformen con menos. Entonces verán crecer cada día la luz del Evangelio, en ustedes mismos y a su alrededor.
Lágrimas, emoción a flor de piel y un sentimiento de esperanza inundó la explanada para clausurar un evento para la historia.
Y otra fecha muy significativa en este mes de agosto fue el aniversario de los 100 días del Papa León gobernando la barca de Pedro.
En estos 100 días, tampoco paró de pedir por el fin del conflicto en Gaza.
Y, si hay un lugar que ha caracterizado las primeras vacaciones de León, ese ha sido Castel Ganfolfo. Allí, el 17 de agosto tuvo lugar una comida muy especial.
León XIV llegó a la zona del Borgo Laudato Si' en los jardines vaticanos del Palacio Pontificio. Allí se había organizado un gran almuerzo con las personas sin recursos.
Y este fue el menú: algunos entrantes locales, lasaña, parmesana tradicional, ternera asada, macedonia de frutas y un postre muy especial. Lo han llamado Dolce Leone, una mouse al limón.
Y a puertas del cierre de este mes estivo, el Vaticano ya se preparaba para acoger otro evento multitudinario e histórico: la canonización de los beatos Carlo Acutis y Pier Giorgio Frassati, jóvenes que supieron vivir la santidad y abrazaron la fe y que ahora se han convertido en un ejemplo para todos los demás,
