La creación de nuevos cardenales es muy relevante porque con ella el Papa influye en la votación de su sucesor. Los purpurados elegirán en el futuro al próximo Papa, que será precisamente uno de ellos. ;
Es un club muy selecto en el que no se entra por meritos sino por decisión directa y personal del pontífice. ;
Según la ley del cónclave, en la capilla sixtina sólo pueden entrar 120 cardenales, los que sean menores de 80 años. Por eso, cuando quedan suficientes puestos vacantes, los Papas buscan quienes los ocupen. ;
Como quedaban 12 vacantes, Francisco ha hecho nuevos cardenales. ;
Actualmente hay 228 cardenales. De ellos, 121 son menores de 80 años, aunque el cardenal Sarr de Senegal cumplirá 80 a finales de este mes.
De entre los electores, 21 fueron nombrados por Juan Pablo II, 56 por Benedicto XVI y 44 por el Papa Francisco. ;
Francisco ha convocado tres consistorios. Con sus nombramientos ha intentado dar presencia en los futuros cónclaves a católicos de lugares lejanos de Roma. Significa que hay menos cardenales electores de Europa y America del Norte y más de Latinoamerica, África, Asia y Oceanía. ;
Italia tiene 25 cardenales electores, le sigue EEUU, con 10; Francia y Brasil, con 5, y Mexico, España, Polonia e India, con 4. ;
Francisco ha elegido personas de Iglesias que han sido castigadas con tragedias naturales, guerra o hambre (como el cardenal Nzapalainga de República Centroafricana o Baltazar Porras de Venezuela); obispos que han ayudado activamente a quien sufre (como el nuncio en Siria, Mario Zenari); o personas que reúnen consensos porque han presidido organismos de obispos (como el mexicano Carlos Aguiar que presidió la Conferencia de Obispos de America Latina). ;
Curiosamente, el Papa Francisco ha elegido en estos años tanto al cardenal más anciano como al más joven. Se trata del colombiano Jose de Jesús Pimiento, que tiene 97 años; y Dieudonne Nzapalainga, arzobispo de Bangui, en la República Centroafricana, que tiene 49. ;
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