El Papa comenzó su paseo en papamóvil por la plaza de San Pedro con un invitado especial: este pequeño con síndrome de Down. Francisco saludó a miles de peregrinos venidos a Roma para una ocasión especial: la Semana Santa.
Comenzó su catequesis desafiando a los presentes con una difícil pregunta.
FRANCISCO
“Querría haceros una pregunta. ¿Qué fiesta es la más importante de nuestra fe? ¿La Navidad o la Pascua?”.
“La Pascua”.
“No escucho”.
“Pascua”.
“La Pascua”.
Ante la proximidad del Triduo Pascual el Papa explicó en esta catequesis el sentido de la Muerte y Resurrección de Cristo. Subrayó que Jesús dio su vida por la humanidad gratuitamente, sin pedir nada a cambio.
FRANCISCO
“En el Triduo Pascual la memoria de este acontecimiento fundamental se celebra llena de reconocimiento y, al mismo tiempo, renueva en los bautizados el sentido de una nueva condición. FLASH. Por el bautismo, de hecho, resucitamos con Jesús y damos muerte a las cosas y a la lógica del mundo, renacemos como criaturas nuevas: una realidad que necesita existir de modo concreto día tras día”.
El Papa dijo que en la Vigilia Pascual que celebrará en el Vaticano bautizará a 8 personas. Explicó que el agua es un símbolo de la Resurrección y recordó que en muchos países hay tradiciones que explican de modo distinto este simbolismo.
FRANCISCO
“Las mamás, las abuelas, llevan a los niños a lavarse los ojos con agua, con el agua de la vida, para mostrar que ahora ven con los ojos de Jesús, las cosas nuevas. Dejémonos lavar el alma en esta Pascua, lavarse los ojos del alma para ver las cosas bellas y hacer cosas bellas. Y esto es maravilloso. Esto es exactamente la Resurrección de Jesús tras su muerte, que es el precio que pagó para salvarnos”.
Concluyó la catequesis deseando a todos una feliz Pascua y pidiendo que no se olviden de los motivos profundos de estas celebraciones.
