Más de 70 instituciones religiosas de 10 países dejarán de invertir en combustibles fósiles. El valor no es pequeño: se trata de 3.600 millones de euros.
El director ejecutivo del Movimiento Laudato si', Tomás Insua, dice que es la mayor desinversión de la historia realizada por organizaciones religiosas. Y espera que tenga efecto.
TOMÁS INSUA
Director ejecutivo Movimiento Laudato si'
“Las mismas empresas petroleras, en sus reportes anuales, por ejemplo Shell hace un tiempo, diciendo que están preocupados porque, como esta campaña de desinversión crece tanto, ellos están perdiendo acceso al capital. Por ejemplo, una empresa como Total, la petrolera francesa, ahora está con un gran oleoducto, realmente horrible, en Tanzania y en Uganda, y están teniendo dificultades para acceder a financiamiento para esos grandes proyectos”.
Tomás Insua señala que la encíclica Laudato si' ha supuesto un antes y un después en entornos católicos. Dice que ha concienciado sobre la necesidad de frenar la crisis climática.
Explica que las instituciones religiosas están a la cabeza de instituciones que dejan de invertir en combustibles fósiles. Son el 35% de lo que considera una tendencia global.
TOMÁS INSUA
Director ejecutivo Movimiento Laudato si'
“La verdad que sí llega un poco tarde. Pero más vale tarde que nunca.Así que, si bien todo esto tendría que haber ocurrido hace varios años, es muy bienvenido y es una gran noticia”.
Además del anuncio de desinversión en combustibles fósiles, más de 100.000 personas y 425 organizaciones católicas han firmado la petición “Planeta Sano, Gente Sana” dirigida a los líderes de la COP26 y la COP15. Una petición impulsada por el Movimiento Laudato si', entre otras organizaciones, que exige medidas concretas ya y un plan de actuación de los gobiernos a nivel mundial.
BSB
