En su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz el pontífice pidió tres cosas concretas:
En primer lugar, como lleva repitiendo con insistencia en las últimas semanas, que los países ricos perdonen la deuda a aquellos más pobres.
FRANCISCO
Que el jubileo sea una ocasión para perdonar las deudas, sobre todo a los que afectan a los países más pobres.
En segundo lugar el papa pidió que se quite un porcentaje fijo de la inversión armamentística y se destine a la creación de un fondo mundial contra el hambre.
FRANCISCO
La verdadera respuesta no son más armas, más sanciones. Me avergoncé cuando leí que un grupo de estados se ha comprometido a gastar el dos por ciento, creo, o el dos mil por ciento de su PIB en la compra de armas, como respuesta a lo que está sucediendo ahora. Una locura.
Por último el papa ha pedido respeto para la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural. Como gesto concreto ha pedido la eliminación de la pena de muerte en todos los países. A principios de diciembre se mostró muy afectado por esta cuestión.
FRANCISCO
Hoy me viene al corazón pediros a todos que recéis por los detenidos que en los Estados Unidos están en el corredor de la muerte. Creo que son 13 o 15.
Precisamente dos semanas después Estados Unidos anunció la conmutación de las penas capitales de 37 presos.
La iniciativa de que la Iglesia dedicara el primer día del año a la paz surgió durante el pontificado de Pablo VI. La de 2025 es la edición número 58.
JRB