En su viaje a República Democrática del Congo y Sudán del Sur, Francisco lanzó mensajes muy fuertes contra el colonialismo económico. Lo llamó un nuevo tipo de esclavitud. Dijo que los países económicamente desarrollados cierran los ojos, los oídos y la boca ante sus propios abusos.
FRANCISCO
Sucede la paradoja de que los frutos de su tierra se convierten en 'extranjeros' para sus habitantes.
África no es una mina para explotar o un suelo que saquear.
En su segundo día de viaje, el Papa escuchó los testimonios de víctimas de la guerra en la parte este del país. El conflicto se ha alargado durante 25 años y se ha cobrado tres millones de víctimas, sobre todo por la presencia de la guerrilla M23.
Fui retenida como esclava sexual durante tres meses. Cada día, entre cinco y diez hombres abusaban de cada una de nosotras. Nos obligaban a comer pasta de maíz con la carne de las personas asesinadas. Otras veces mezclaban la carne de esa gente con la de animales y era nuestra comida diaria.
Francisco les acompañó mientras ofrecían a los pies de una cruz objetos de sus agresores como muestra de perdón. Había machetes, martillos e incluso alfombras que se usaron para violar.
En Sudán del Sur, el Papa subrayó el papel de las mujeres que cuidaban y proveían a sus familias a pesar de la violencia. Dijo que ellas son el futuro de la nación si tienen los recursos necesarios.
FRANCISCO
Las madres, las mujeres, son la clave para transformar el país. Si reciben las oportunidades necesarias, a través de su esfuerzo y actitud por custodiar la vida, tendrán la capacidad de cambiar el rostro de Sudán del Sur.
Por favor: proteged, respetad, valorad y honorad a cada mujer.
Y en el encuentro de oración ecuménica por la paz justo al arzobispo anglicano Justin Welby y el moderador de la Iglesia presbiteriana de Escocia, Iain Greenshields, Francisco dijo a los sursudaneses que ser cristiano implica tomar un compromiso claro con la paz.
FRANCISCO
Quien sigue a Cristo elige la paz siempre. Quien desencadena guerras y violencia traiciona al Señor y reniega de su Evangelio.
“Amaos los unos a los otros como yo os he amado”, este es el mandamiento de Jesús que contradice cualquier visión tribal de la religión.
Son los mensajes más importantes del cuadragésimo viaje apostólico del Papa, en este caso a África y con un fuerte componente ecuménico porque las Iglesias católica, anglicana y presbiteriana escocesa reúnen a más de la mitad de los creyentes de Sudán del Sur.
RM
