Aunque estos hombres no tienen miedo a nada, parece que el Vaticano les imponía respeto.
Algunos venían con heridas..., son los jugadores del CURNE, el Club Universitario de Rugby de Resistencia, en Argentina.
Están en el Vaticano porque acaban de ganar en Portugal el campeonato europeo de su categoría.
Aprovechando el viaje, compartieron la experiencia con el Papa, que quiso saludarlos en el Vaticano.
En cuanto llegó Francisco, se les pasaron los nervios. Le regalaron una camiseta, y a cambio el Papa bendijo sus rosarios.
“Esto es un presente de Jorge Milton, se lo envía para usted con su dedicatoria”.
“Padre, yo soy médico, trabajo en un hospital...”
Fue un encuentro breve, pues no tienen tiempo para despistarse. Este fin de semana les espera otro campeonato en Madrid.