El próximo Sínodo de Obispos introducirá un nuevo método de trabajo. El objetivo es dar voz al mayor número de católicos posible.
Comenzará siempre con una fase local. Y para ayudar a que cada diócesis lo organice eficazmente, el Vaticano ha presentado un documento temático y un vademécum con las instrucciones.
CARD. MARIO GRECH
Secretario General, Sínodo de Obispos
“Un Sínodo es una experiencia. Es el ejercicio de escuchar al Espíritu Santo escuchando los unos a los otros. Se trata de realizar una verdadera y auténtica conversión. No solo a nivel pastoral sino espiritual y según la línea del Concilio Vaticano II”.
El tema del próximo Sínodo de Obispos es cómo conseguir una Iglesia más sinodal, como en los primeros tiempos del cristianismo.
El Sínodo de Obispos arrancará con una ceremonia en Roma el 10 de octubre y la asamblea final será dos años más tarde, en octubre de 2023.
El modelo empezará a nivel local con sínodos diocesanos.
En los próximos seis meses los obispos pedirán a los laicos que respondan a preguntas como estas:
Cuando decimos “nuestra Iglesia”, ¿de quiénes estamos hablando?
¿Qué personas o grupos son apartados de la Iglesia de forma directa o indirecta?
¿Cómo promovemos en nuestras comunidades un estilo comunicativo libre y auténtico?
¿Cómo se escuchan a los laicos, y concretamente a los jóvenes y a las mujeres?
Para que los obispos puedan consultar con el mayor número de católicos posible, el Vaticano ha lanzado un documento sobre qué es la sinodalidad y cómo los obispos pueden implantarla en su diócesis.
SOR NATALIE BECQUART
Subsecretaria, Sínodo de Obispos
“Es muy importante que cada diócesis pueda adaptar estas líneas guía a su contexto local. La sinodalidad no es una técnica, no hay un modo único de llevarla a cabo”.
Los documentos también advierten de peligros como entender la sinodalidad como un parlamento o reducir la sinodalidad al Sínodo de Obispos.
MONS. LUIS MARÍN DE SAN MARTÍN
Subsecretario, Sínodo de Obispos
“El Sínodo de los Obispos es una manifestación de la sinodalidad, pero no la única. Hay otras manifestaciones de sinodalidad en la Iglesia como son los consejos pastorales, los consejos episcopales y puede haber otras”.
En octubre el Papa Francisco inaugurará el Sínodo. Una semana más tarde y, por primera vez en la historia, cada obispo hará lo mismo en su diócesis.
Todas las reflexiones que se recojan en las diócesis, serán analizadas por los obispos a nivel nacional y luego continental. El último paso será el encuentro mundial, en Roma.
