Benedicto XVI pasará a la historia por su renuncia, su profunda teología y por ser el pontífice más longevo. Pero también se ha convertido en el primer Papa que responde directamente a acusaciones de mala gestión de casos de abusos.
Las 4 acusaciones publicadas en un informe encargado por la archidiócesis de Múnich podrían empañar su legado. Pero según el historiador Roberto Regoli, Benedicto XVI será recordado positivamente por las medidas que tomó para combatir la crisis de abusos a lo largo de su pontificado.
ROBERTO REGOLI
Historiador, Pontificia Universidad Gregoriana
“No miró hacia otro lado. Empezó a condenar a los religiosos responsables, a fundadores de órdenes religiosas, lanzó nuevas medidas canónicas para perseguir a abusadores, fue el primer Papa que se reunió con víctimas e incluso lloró con ellas”.
En su carta, el Papa emérito no se disculpa específicamente por los casos citados en el informe, pero pide perdón por sus carencias cuando ha ejercido cargos de responsabilidad.
ROBERTO REGOLI
Historiador, Pontificia Universidad Gregoriana
“En su carta se hace cargo espiritualmente del drama de aquellos sufrimientos, se responsabiliza de lo ocurrido como jefe espiritual: Como diciendo, yo era el jefe, era el responsable”.
Para muchas organizaciones de víctimas no es suficiente. El Vaticano ha presentado un informe de un equipo legal de Benedicto XVI que explica que no encubrió ningún abuso. Según Roberto Regoli también este documento siembra un nuevo precedente en el papado.
ROBERTO REGOLI
Historiador, Pontificia Universidad Gregoriana
“Se abre un camino que no tiene marcha atrás, significa que ante lo que está sucediendo se debe responder no sólo con discursos sino también con equipos jurídicos”.
El informe alemán demuestra que ni siquiera los Papas están libres del escrutinio en su gestión de los abusos. En cuanto a cómo la Historia considerará la respuesta de Benedicto, sólo el tiempo lo dirá.
JM/JMB
