Es quizás esta una de las imágenes que más acostumbramos a ver cada vez que visitamos los templos o santuarios. Los fieles rezando el rosario…
Quizás se trata de la oración mariana más extendida.
Esto se lo debemos a santo Domingo de Guzmán y a la orden que él mismo fundó: 'los dominicos'. La Iglesia, cada 8 de agosto, celebra su memoria.
Según la tradición, en el año 1208, María se le apareció a santo Domingo y le hizo entrega del rosario. La Virgen le encargó que propagara la devoción a esta oración.
Ocho siglos después, el rezo del rosario es una de las oraciones a las que más se recurre.
Los últimos pontífices no se han escondido. San
Juan Pablo II proclamó un año dedicado al Rosario, fue del 2002 al 2003. Además, por si esto no fuera poco, introdujo los misterios luminosos.
Benedicto XVI aprovechaba varios de sus paseos para rezarlo. Mírenlo aquí, en Castel Gandolfo, con su secretario personal.
En el caso de Francisco, fueron varias las ocasiones en las que exhortó a los fieles a ser devotos de esta oración.
FRANCISCO
Necesitamos aprender esto con la Madre de Dios; mostrémonos agradecidos rezando el rosario todos los días.
Y el papa León, el 31 de mayo de este mismo año, cerró el mes dedicado a María acudiendo a la gruta de Lourdes ubicada en los jardines Vaticanos. Allí rezó el rosario y dirigió estas palabras.
LEÓN XIV
Habéis rezado juntos el Santo Rosario: una oración, como subrayaba san Juan Pablo II , con fisonomía mariana y corazón cristológico, que «concentra en sí la profundidad de todo el mensaje evangélico».
Una oración que, lejos de caer en olvido, el encargo que la Virgen hizo a santo Domingo de Guzmán sigue siendo una realidad a día de hoy.
AM