Durante una audiencia en el Vaticano, el papa León XVI se reunió con las hermanas de Santa Catalina Virgen y Mártir, las misioneras salesianas de María Inmaculada, las hermanas de San Pablo de Chartres y las carmelitas descalzas de Tierra Santa. A todas ellas les dirigió estas palabras:
LEÓN XIV
Hablemos de mujeres extraordinarias que partieron en misión en tiempos difíciles; que se inclinaron sobre las miserias morales y materiales en los ambientes más abandonados de la sociedad; que, para estar cerca de quienes estaban en necesidad, aceptaron arriesgar la vida, hasta perderla, víctimas de brutales violencias en tiempos de guerra.
Mencionó ejemplos como María Gertrudis de la Preciosa Sangre, Marie-Anne de Tilly y Santa Teresa de Ávila, a quienes describió como “mujeres fuertes y valientes” que abrieron el camino a muchas otras y que hoy siguen siendo un modelo de mujeres generosas.
El Pontífice también saludó de manera especial a las carmelitas descalzas de Tierra Santa:
LEÓN XIV
Es importante lo que estáis haciendo, con vuestra presencia vigilante y silenciosa en lugares lamentablemente desgarrados por el odio y la violencia, con vuestro testimonio de abandono confiado en Dios, con vuestra constante invocación por la paz.
El papa concluyó agradeciendo «el bien que realizan en tantos países y en tantos contextos» y aseguró a todas las consagradas su oración.
BAM
