El líder de los obispos de Corea del Sur entregó personalmente al Papa una carta del nuevo presidente del país, Moon Jae-In. La misiva es una petición para que Francisco ayude a abrir el diálogo entre Corea del Norte y Corea del Sur.
ARZ. KIM HEE-JONG
Arzobispo de Gwangju (Corea del Sur)
'Cuando le entregué la carta, la recibió muy bien. Nos dijo que rezará por nosotros. Creo que el Santo Padre nos ayudará a normalizar (las relaciones) entre los dos países'.
El arzobispo asegura que a lo largo de la historia de Corea, la Santa Sede y los papas siempre han rezado, alentado y bendecido el diálogo. Precisamente, asegura que pronto participará en un encuentro con líderes religiosos de Corea del Norte.
ARZ. KIM HEE-JONG
Arzobispo de Gwangju (Corea del Sur)
'Hasta ahora era muy difícil porque no había diálogo entre nosotros, pero el nuevo presidente ha tratado de abrir el diálogo. De hecho, en los próximos meses, los líderes religiosos de Corea entrarán en Corea del Norte para reunirse con líderes religiosos. Creo que es una señal para reconstruir las relaciones entre los dos países'.
Ante la escalada de tensión entre las dos Coreas, la Iglesia católica apuesta por el diálogo y por que sean los mismos coreanos quienes resuelvan la situación.
ARZ. KIM HEE-JONG
Arzobispo de Gwangju (Corea del Sur)
'Yo estaba muy preocupado porque creo que la única solución a esta grave crisis es el diálogo y la negociación. No con armas ni con control. Para construir la paz debemos buscar juntos una solución'.
Aunque el Papa no ha respondido oficialmente a esta carta del presidente de Corea, sin duda es una buena señal que le hayan pedido ayuda para resolver la crisis con el diálogo.
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